jueves, 28 de marzo de 2013

Un paseo por el pasado

Ayer salí a pasear con Sergio. Después de 9 horas de oficina, una y media de inglés, y una buena merienda,(llegué a casa muerta de hambre), decidí dar una vuelta con el peque y despejarme.
Paseé por las calles de mi pueblo, el de siempre, donde crecí, y ya casi al final del paseo me metí por el parque donde siempre quedaba con las amigas para salir.

Allí, en el mismo banco donde solíamos reír y charlar, otras "niñas" ocupaban nuestro lugar. Una chillaba, la otra preguntaba, todas reían.

Y entonces me di cuenta de que yo ya no pertenecía a ese banco, ahora era de otra, que se reía por mi, que cometería los mismos errores que yo cometí, que viviría cosas parecidas, y cosas nuevas.
Y pensé: Dios mio!
 ¿En que momento dejé de ser esa cría que ríe y chilla?
 ¿En que momento aparqué las camisetas de colores, y cambié el brillo de labios por el rolon antigolpes?
Ya tengo 30 años, para aquellas mocosas soy una carroza, una madre que empuja un carro...pero no hace tanto yo estaba allí. ¿O si?

Me fui alejando del parque sin saber en que parte del camino dejé de ser una chiquilla para convertirme en una adulta, pero teniendo la certeza de que un día pasearé otro carro, el de mi nieto (ojalá), y entonces recordaré con cariño esta etapa en la que paseo a mi hijo.

martes, 26 de marzo de 2013

Gracias

Ahora que tengo unos minutillos, después de un día de perros en la oficina (ya van unos cuantos), de hacer mil y una cosas, y correr de aquí para allá, ahora que mi hijo esta entretenido destrozándome el salón, voy a aprovechar por fin para daros las gracias.

En primer lugar daros las gracias vosotr@s, mis lectores, los que me leen a menudo, los que me leen de casualidad, los que me siguen (gracias Bego), los que comentan y los que no, a todos un millón de gracias. Sin vosotros este blog no tendría ningún sentido.

En segundo lugar, y espero me perdone por el retraso, tengo que dar las gracias a mi compi MamiBuho, por nombrar una entrada mia en su blog, y haberme permitido, con este gesto, conocer a muchas mamis, y que ellas me conozcan a mi. Así que, como es de buen nacido ser agradecido, aquí va el enlace a su blog, donde me nombra (aqui) (ains que ilu!!). Gracias Gina!!

Por si fuera poco, descubrí que en el blog de una de las madres que me leyeron, también publicaron un enlace con dirección a mi entrada, así que, aquí va el enlace a su blog (éste). Gracias MyA!!

Por último, decir que, aunque no tengo nada de tiempo, pero nada de nada, me he apuntado (al final me han aceptado por pesada) a una aventura que me parece muy interesante. Se trata de un nuevo blog en el que participo, Las 3 maternidades. Alli, siete mamis, entre ellas una servidora, publicaremos una entrada cada dia..yo publico los viernes, así que en dos días me estreno. Gracias por esta oportunidad a las compañeras del blog. Y a vosotr@s espero que os guste.

Ahh por si no lo había dicho:

¡¡GRACIAS!!

lunes, 25 de marzo de 2013

Un susto de muerte

El sábado por la mañana el pequeño Sergio se despertó sobre las 7:30, como veía que era en vano intentar que volviera a dormirse, le pusimos los dibujos y su padre y yo intentamos descansar.

Enfrente de su cuna esta un sinfonier alto de cajones, robusto, de madera maciza, y encima una tele, no muy grande, pero con fondo, de estas que tienen ya unos años, no es plasma, pesa lo suyo.

El pequeñajo se puso de pie, cogido de los barrotes de la cuna, enfrente de dicho sinfonier y viendo La Abeja Maya. Todo parecia ir bien, el peque veia los dibujos de lo más entretenido y yo empezaba a conciliar el sueño..sábado por fin, pensé, me merezco unos minutos más de sueño. Qué ilusa!

Unos minutos o instantes después, cuando me encontraba ya entre la tierra y el cielo me sobresalté con un grito de mi marido: ¡cuidado!. Mis ojos se abrieron, y mi corazón dio un vuelco.

Mi pequeño había abierto un cajón del sinfonier, había volcado el mueble hacia él, que chocó contra la cuna, pegué un salto de la cama, mientras la tele y el TDT que tenía encima descendían, cuando llegué a él (no fueron más de dos segundos), la tele había caído en la cuna, justo detrás de él, el TDT quedó suspendido por los cables, lo vi de espaldas, quieto y sin decir nada y sin saber si la tele le había golpeado o no en la cabeza...os juro que pensé que se había quedado en el sitio...literalmente...entonces empezó a llorar con fuerza..yo solo podía decir: ay madre mía, ay madre mía.

Su padre lo cogió, salimos a la cocina, yo cogí el Arnidol (un rolon para los golpes), vimos que tenia roja la parte alta de la frente.

Le pusimos el rolon en el golpe, y mi marido me dijo que la tele no le había dado, que el golpe era del cajón del sinfonier..a todo esto yo era un auténtico flan, me temblaban hasta las pestañas, las piernas, los brazos ,las manos, no podía ni articular palabra. No sabía si acercarlo a urgencias a que lo reconocieran o a que me dieran a mi un buen chute de calmantes.

A los pocos minutos el llanto paró y empezó a reírse con las carantoñas que su padre le regalaba. Empecé a respirar. Levantamos la tele, el TDT y colocamos el mueble en horizontal, la tele pesaba una barbaridad. Su padre empezó a quitar los tiradores del mueble, y dejó el colchón de la cuna prácticamente a ras de suelo.

Empecé a sentirme culpable, mala madre y mala persona, por haber querido dormir unos minutos más y dejar a mi hijo "solo ante el peligro" viendo los dibujos. No quiero ni imaginarme lo que hubiera pasado si la tele hubiera caído unos centímetros más delante, en su cabeza.

¿Cómo es posible que, un "bebé" de 12 meses, haya sido capaz de volcar un mueble de 1.40 metros de alto, macizo, con todo lo que llevaba encima? y, si esto lo ha hecho con 12 meses, 11 kilitos y 78cm de altura..¿qué será capaz de hacer mi angelito cuando tenga unos cuantos meses más, y ande, y corra y salte?... de verdad os digo que no quiero ni pensarlo, al igual que no sé si mi corazón podrá aguantar más sobresaltos de esta embergadura.

viernes, 22 de marzo de 2013

La extraña llamada

Hace días que sucedió, no sabia si contarlo o no, pero ya que este blog me sirve como terapia,
he decidido contároslo.

Hará unas tres semanas mi marido me comentó que un compañero suyo "veía",
era vidente, vamos. No quería que lo supiera la gente, sin embargo a él se lo dijo.
Me comentó que le dijo que en el próximo concurso, que se resolverá recientemente,
le tocaría en un lugar cerca de la playa.
Comentándolo con él, nos dimos cuenta de que casi todos los destinos que mi marido habia marcado eran próximos a la playa,
y si finalmente se quedaba otro año más en Barcelona, evidente estaria también cerca del mar. Por lo que no nos sirvió de mucho.

La cosa hubiera quedado en una conversación curiosa de no ser porque mi marido me dijo que M (su compañero vidente),
le preguntó si yo estaba embarazada...entonces la conversación cogió otra magnitud, y empecé a sentirme muy interesada.
Mi marido le dijo que no, pero que había tenido un aborto recientemente. "Ya veo" le contestó. La cosa quedó ahi.

Unos días más tarde, mientras preparaba el biberon de la cena para Sergio, llamé a mi marido, que estaba trabajando,
y me dijo que M quería hablar conmigo, me sorprendió y accedí, algo nerviosa la verdad, ¿un vidente quería hablar conmigo?,
¿que me queria decir?.

-Hola M, soy Lia, que tal?

-Hola que tal, como estas?- tenia un acento gaditano muy gracioso- ¿quieres hacerme alguna pregunta?-en ese momento me quedé en blanco.

-Ehh,ummm...pues...quiero saber si voy a tener más hijos?

-Si, tendrás dos más, y serán sanos, no tendrás ningún problema.

Me sentí aliviada, siempre quise tener tres hijos, por lo que el cielo se abrió ante mi...me dijo que sexo tendrán, y que no volveré a pasar por otro aborto..me sentí aliviada. También me dijo que muy pronto volveré a estar embarazada.

Le pregunté por mi aborto, por las causas, si había sido por algo que había hecho, por dar el pecho, por un disgusto...NO, fue rotundo, fue porque no era su momento, porque esa niña no tenía que nacer. Sí, me dijo que era niña, lloré desconsoladamente, siempre quise tener una niña, mi intuición me decia que era niña, y según M no me equivoqué.

Me dijo que no llorase, que no estuviera triste, que yo no tenía la culpa de nada, que alguien, un familiar que ya no estaba, me había protegido de alguna manera, a mi y a mi hija, decidiendo que no naciera, según él porque tendría un grave problema o una enfermedad. Entonces pensé en mi abuelo, él falleció un mes antes del aborto, y en su lecho de muerte le pedí que cuidará de mi embarazo...supongo que esa fue su respuesta.

Por momentos pensé que se estaba quedando conmigo, que era una conjetura entre él y mi marido para que levantara cabeza,
que sería un timo, que como iba a saber él todas esas cosas...supongo que tendré que esperar y comprobar si se va cumpliendo aquello que me dijo.

Le di las gracias, me despedí, nos despedimos, me dijo que si quería alguna vez preguntarle algo que se lo dijera a mi marido. Me pasó con él, que me dijo que tenia mucho lio en el trabajo, y colgué.

Allí me quedé, con el biberón en una mano y el móvil en la otra, pensando si sería cierto, si era un engaño, si era real todo lo que me había dicho.

Una lágrima salada se introdujo entre la comisura de mis labios. Me sentí en paz, como si el duelo por mi pequeña hubiese concluido.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Del bebé estrella al bebé arcoiris

Desde que tuve el aborto me he estado empapando de historias y experiencias sobre el tema en internet, visito varios foros frecuentemente, y varios blogs de madres, que han pasado o no por esta triste experiencia.

Muchas veces me he encontrado términos que no entendia muy bien que significaban, y que poco a poco he ido descubriendo, de los que más me han llamado la atención me quedo con el término bebé estrella y bebé arcoiris, y con la definición que he encontrado en una página, que me parece muy buena. Espero que os guste

Yo ya tengo a mi bebé estrella, y deseo con todas mis fuerzas a mi bebé arcoiris.


El término “bebé estrella” designa a las criaturas que no tuvieron vida aérea o apenas, que sólo vivieron en el seno de su mamá. Es una manera poética y empática de hablar de los casos de muerte gestacional-perinatal, y que implica reconocer que existieron y que fueron y siguen siendo importantes para sus papás y para los familiares que mantienen su recuerdo.

Cuando una pareja ya transitó la parte más inmediata y profunda del duelo por su bebé, generalmente llega un punto en el que regresan las ganas de volver a ser padres. Este nuevo ser, hermano del que se fue, llega en unas circunstancias especiales, a través de un embarazo lleno de ilusión pero también de miedos y mucha angustia; unos padres que han perdido la inocencia de la espera. El término “bebé arco iris” designa la criatura que nace después de la pérdida de un bebé anterior. Es el entendimiento de que la belleza de un arco iris no niega la ferocidad de la tormenta acontecida.

Un arco iris no significa que la tormenta nunca sucedió o que la familia ya no está lidiando con su dolor. Lo que significa es que algo hermoso y lleno de luz apareció en medio de la oscuridad de las nubes.

A la felicidad de la llegada de un bebé sano a los brazos de mamá se une el revivir con fuerza el dolor por  la falta del hermano, que se hace más palpable con el nuevo bebé presente en la familia. Aquello que el hermano anterior no pudo vivenciar, estrenar, tener, es vivido por los padres con la llegada del siguiente bebé, el nuevo hermano revive la ausencia del anterior.

Muy a menudo, el parto del bebé arco iris sucede próximo al primer aniversario de la muerte del bebé estrella. Un momento de gran alegría que se solapa con las fechas del drama vivido justo el año anterior. Si el bebé estrella se hubiera quedado, el bebé arco iris no estaría aquí.

Las luces y las sombras del puerperio de maternidades tras pérdida no han sido casi expresadas aún. Una mamá que ha perdido un bebé se ha culpabilizado por ello muchas veces. Tarde o temprano, en el camino del duelo, llega a  ‘perdonarse’ o puede empezar a suavizar este sentimiento hasta entender  e interiorizar que  no fue culpa suya. Cuando llega el bebé arco iris a sus brazos la culpa aparece de nuevo. No puede estar al 100% feliz con la llegada de este bebé, porque está aún recorriendo el duelo por el hermano muerto. Se siente culpable de no poder ofrecer toda la alegría, felicidad, confianza, inocencia y proyectos de futuro  que siente que ese  bebé _ al que quiere con locura_ merece.

Pasar por la pérdida de un bebé que ha vivido en el seno implica sentir para siempre que no hay  control posible,  esto hace muy angustioso el embarazo y la posterior crianza del nuevo bebé. La mayoría de madres, aunque su bebé arco iris haya nacido sano y fuerte, verbalizan su miedo a que también muera en cualquier momento, sin previo aviso.

Para el entorno, en cambio, este nacimiento ‘exitoso’ rubrica  ‘un final feliz’  a una historia trágica. Sienten que todo se ha solucionado. Pero los padres siguen echando en falta al bebé que murió. Demasiadas veces es difícil de entender para el entorno, pero no lo es tanto si lo comparamos con situaciones que nos cuesta menos entender. Cuando el amor y el vínculo median, no sirve un: “a rey muerto rey puesto”; jamás. Si a una mujer se le muere un hijo y el hermano de éste tiene un bebé, nadie va a pensar que “ya está” porque en esa familia ha llegado otro miembro, quizás el primer nieto de la mamá en duelo. Claro que este nacimiento va a ayudar a esta familia,  va a hacer felices a muchos, pero eso no quita el duelo, la tristeza y la añoranza por el familiar fallecido de estas mismas personas. Los padres de un bebé arco iris sienten que esta criatura cierra las puertas al recuerdo del bebé anterior para el resto del mundo pero no para ellos.

Cuando una mujer pierde un bebé a las puertas de abrazarlo siente enloquecer, no entiende nada, se siente culpable, desesperada y vacía, traicionada en lo más profundo.  No en todos los casos, pero sí en muchos, se siente una necesidad imperiosa de tener un nuevo hijo inmediatamente, no para ocupar el lugar del bebé que se fue, pero su corazón, su esencia, su voz interior gritan la necesidad de un bebé en brazos a quien amar y cuidar. Si el embarazo llega enseguida, los primeros estadios del duelo coinciden con el desarrollo de la nueva vida en camino.

El miedo está presente en todo momento, por si tarda el positivo, por si llega y se repite un fatal desenlace, incluso da miedo que salga todo bien por si ha sido demasiado rápido el nuevo positivo y la mamá siente que le van a fallar las fuerzas o una vez en cinta no se siente preparada aún.

La presión del entorno para que la mama se embarace cuanto antes y “borre” lo imborrable no ayuda en nada. Siempre es recomendable ser respetuosos con la intimidad y las decisiones de la pareja, pero en estos casos, más si cabe. Este hecho hace que algunas parejas nieguen estar buscando cuando en realidad sí están en ello y es lo que más anhelan.

El miedo , el pánico, la angustia se apropian de la mamá en cuanto ve el positivo, con mayor fuerza en la medida en que se acerca la fecha del fatal desenlace anterior. Surge la dificultad de conectarse con este nuevo bebé y añade a la madre desasosiego. El miedo y la incertidumbre lo invaden todo. Y traspasada la fecha temida, la situación no mejora como  era esperado.
Según cómo fuera el parto anterior, queda impreso en la mamá el terror a parir al nuevo bebé. Muchos partos de bebés estrella transcurren con un acompañamiento poco adecuado, sin empatía, e incluso con violencia obstétrica añadida. Muchas veces se llega al nuevo parto con un Trastorno de Estrés Postraumático  no diagnosticado ni tratado.

Todo el mundo está muy contento con el nuevo embarazo, porque significa que la mamá “está mejor”, pero la mamá sigue llorando al bebé fallecido. Es duro  seguir no teniéndole.
Es fundamental que los profesionales que acompañan el embarazo y parto de bebés arco iris se preparen para ello.
Una comadrona bien preparada puede escuchar los miedos de la mamá, validarlos, entender y ayudar con empatía a tener un buen parto, con un acompañamiento emocional acorde con las circunstancias y necesidades de toda mamá.

Muchas embarazadas en estas circunstancias tienen miedo a que les dificulte el parto el hecho de tener en mente al bebé fallecido. Pero es inevitable. Es bueno que sepan que no es malo para el parto sentir que el bebé anterior lo impregna todo, va a ser así y esto no va a impedir que el nuevo bebé pueda tener un buen descenso y un buen recibimiento.

“ ¿Por qué lloras si has tenido un buen parto y un bebé sano y precioso?” Muchas mamás se quejan de esta pregunta que se repite demasiado a menudo. Sienten que todo el mundo se ha olvidado del bebé que se fue, que su  dolor no lo entiende nadie.
En caso de muerte de uno de los gemelos todo lo comentado se hace presente con la máxima virulencia, porque  sucede a la vez, no hay distancia  cronológica  alguna.

sábado, 16 de marzo de 2013

Crónica de un parto no anunciado

Como homenaje a este dia tan especial para mi, y para mi hijo, he decido contar mi experiencia en el parto, antes de que el tiempo vaya borrando los detalles, aunque seguro que muchos ya se me han olvidado.AVISO: Es una larga historia...

Como conté en otra entrada, (aqui), cuando me dieron la baja pre-maternidad, me fui a Barcelona a vivir con mi marido. Yo cumplia las 40 semanas el dia 30 de marzo, y el 14 teniamos comprados los billetes para estar en Alicante unos dias...billetes que tuvimos que cambiar...

El dia 9 de marzo, (esa noche fue luna llena), me desperté "mojada", lo que me preocupó bastante, como era primeriza y no había roto aguas nunca, pensé que quizá habia roto la bolsa. Mi marido llamó a un teléfono que te pasan con un médico, le comenté lo sucedido y me dijo que fuese al hospital, que habia roto la bolsa..recuerdo que me quedé pensando " no puede ser".

Unas cuantas horas después, tras exploración, monitores, y demás pruebas me dieron el alta, oa bolsa estaba perfecta, el cuello cerrado y dilatación 0. Le comenté a la matrona lo de los billetes, me dijo que no hacia falta cambiarlos, que me veía muy verde.

El dia 12 hicimos un montón de cosas, por la mañana creo estuve arreglando el piso y haciendo la comida, después de comer fuimos a Sants, la estación de tren, para ver a mi prima, ella iba a Barcelona una vez al mes a dar clases de flauta. Tomamos un café con ella y nos despidimos. Después nos fuimos en bus al centro comercial Gran Via 2 (siempre ibamos alli, esta muy cerca del piso).

Después de pegarnos un tute tremendo a andar y a ver tiendas, cenamos en casa, y a la cama. Era lunes, y en la primera, si no me falla la memoria, echaban Spiderman 2, la estuvimos viendo desde la cama...mi costi, como siempre, no aguantó ni el principio d la peli..yo la vi prácticamente entera, hasta que me cansé e intenté dormirme, me giré a un lado, al otro..y nada, algo me decia que esa noche no iba a poder dormir.

Asi fue, tras girarme en una de las veces hacia mi derecha, escuché un ruido "rurrrrrrrr" y entonces un liquido caliente empezó a recorrerme las piernas, me incorporé, y entonces salió más cantidad, no había duda, esta vez si que si, habia roto aguas. Miré el reloj, las 0:00h de la noche, "mierda", pensé, "martes y trece".

Se lo dije a mi maridin, que dormia como los angelitos, y como no se lo creia le acerqué la mano a mi pijama, y entonces, juro que fue literal, saltó de la cama. Empezo a moverse por la habitación diciendo que ahora que, mira la que has liado, llama a tu madre.... A mi me dio por reirme, le dije que se tranquilizara, el se empeñó en coger el movil para llamar, yo se lo quité, se habia vuelto loco! Para que vas a llamar a mi madre? Esta en Alicante, son las 12 de la noche, ella no puede hacer nada!!!

Teniamos que coger un taxi, y ninguno de los dos tenia dinero, asi que le dije que bajara a un cajero y mientras yo me duchaba..asi fue, me duche enseguida, cogí champu, bragas, y calcetines y mi marido subió diciendo que un taxi nos esperaba bajo, lo habia encontrado de casualidad y le dijo que se esperara, recuerdo que le dije "en bajar tiene el taximetro en marcha, ya verás!!.Asi fue, mas de 7 euros iban ya de nuestra cuenta por unos minutos de espera.

Entre funfurreando al coche, cagandome en el taxista y en su mamá y entonces, al poco de ponerse en marcha, apoyé la cabeza en el cristal de la ventanilla, mientras me acariciaba la barriga, "voy a conocer a mi bebé" recuerdo que pensaba. Entonces ya eran más de las 12:30, y recuerdo que la ciudad me pareció otra, completamente distinta, sin coches, sin ruido, completamente tranquila, y me embarque en un viaje trascendental hacia el destino, que cambió para siempre mi vida. Durante el trayecto sentí una contracción, era la primera que sentía en todo el embarazo, volví a acariciarme la tripa.

Una vez llegamos alli, a Sant Joan de Deu
entramos por urgencias, y me pusieron monitores en la misma salita que hacia unos dias. La ginecologa, una mujer sudamericana y muy amable, me dijo, tras estar alli un buen rato, que las contracciones no eran regulares, pero que al haber roto la bolsa me tenia que dejar ingresada.

Un celador me trajo una silla de ruedas y me llevó a la habitación, subimos en ascensor y pasamos por un pasillo bonito, con pegatinas de nubes a los lados, entonces se paró, habitación 713, "joder con el trece" pensé, abrió la puerta y le pregunté "estoy yo sola?", se extrañó y me dijo "claro, la habitación es para ti". Cuando encendí la luz no me lo podiq creer, aquello parecia un hotel de 5 estrellas!! Bueno, tanto no, pero casi. Una habitación enorme, con una minicama para el acompañante, tv, sofá, cambiador, baño, ducha y una cunita con un muñeco, el mismo que adorna esta entrada.

Mi marido llegó después, y después de comentar la suerte de haber ido a parar a ese hospital, me acosté en la cama para intentar dormir...pero nada, empezaron los dolores, cada vez mas fuertes, mi costi contando los segundos, yo desesperada, cada contracción que tenia me iba al baño, fui por lo menos unas 7 veces!! Al final sobre las 4 de la mañana llamamos a un enfermera, y le pedí por favor que me dieran algo para el dolor. Entonces empecé a respirar tal y como me había enseñado la matrona en las clases de preparación, mi marido me animaba diciendome que lo estaba haciendo muy bien..y cuando vino la enfermera me dijo que qué hacia respirando así, que me iba a marear!! Me quedé totalmente descolocada.

Entonces otro celador me bajó a una sala dilatación-paritorio todo en una, y alli retorciendome por los dolores me trajeron el consentimiento para firmar, ni siquiera leí el encabezamiento, es más lo hubiera firmado con los ojos cerrados! Al rato vino la anestesista, me dijo que era de Alcoy, lo que me hizo sentir que realmente no estaba tan lejos de casa. A los 10 minutos de que ese mágico liquido fluyera cerca de mis vértebras todo cambió, me sentí en paz, me dormí.

Cada cierto tiempo iba entrando mi matrona, Eva se llamaba, muy dulce, muy joven y muy guapa. Me decia que iba dilatando bien, bajé con 4 cm, pasé a 6, y al final 9..aun asi, y supongo que por protocolo, me pusieron oxitocina, y otra dosis más de epidural, estaba completamente relajada y somnolienta. Entonces, sobre las 7:30 de la mañana llamé a mi madre, después de tres o cuatro tonos su voz somnolienta y algo asustada:

-Diga?

 -Mamá soy yo, os he despertado no?

 -Si, que pasa?

 -Nada, que anoche rompí aguas y estoy en el hospital, ya estoy dilatada, y en breve empezará el expulsivo.

 -....(unos segundos de silencio)...Ay nena, mira que te dije que....(su voz se empezaba a romper)..mi padre de fondo "que pasa?"..-tu hija, que se ha puesto de parto!

-Mamá no llores que voy a llorar yo también.

-Pues no sé si podremos ir, tengo que hacer los escaparates, a tu abuelo lo tienen que operar..

-No pasa nada-le dije-no te preocupes, Barcelona esta muy lejos.

 Al final tuvimos que colgar, porque empezaba el cambio de turno, mi matrona se despidió deseandome lo mejor, me dio algo de pena que se fuera. Y entonces, empezaron a entran un montón de matronas y enfermeras, se presentaron, empezaron a mover aparatos y cables y a comentar entre ellas- por fin, el primer parto de la noche, menuda nochecita le han dado a la ginecóloga-

 Me dijeron que tenia que empujar, con fuerza, como si fuera al baño, la camilla donde estaba se convirtió en potro, me subieron las piernas, ya que no las notaba, y me cogí de los agarraderos que habia a los lados, para empujarlos hacia mi. Como no notaba las contracciones una matrona se puso a mi izquierda y me tocaba la barriga, ella me decia cuando venia una contracción, y cuando por tanto, debia empujar..y asi lo hice.

 -Vamos vamos no estas empujando bien, otra vez.

 -Empuja mas fuerte.

 Yo no notaba los pujos, no notaba hacia donde iba la fuerza.

 -Como no empujes bien tendremos que utilizar los forceps

Ufff los forceps no por favor..pensé. La matrona de mi izquierda me puso el codo en lo alto de la tripa..yo dije que esa maniobra, la de Cristeler, era muy peligrosa, se asombró de que la conociera y me dijo que solo es peligrosa si no se realiza correctamente, lo que no me tranquilizó. La matrona que estaba sentada enfrente mia me dijo que estaba coronando, mi marido se asomaba, todos miraban..yo pregunté de que color tenia el pelo..-negro, me dijo mi marido..y la enfermera me dijo que le estaba haciendo una cresta.

Se dieron cuenta de que queria verlo y una de las enfermeras me dijo que iba a traer un espejo. Trajo un espejo enorme con soporte de ruedas y lo puso enfrente mia y a un lado..y alli estaba su cabecita! Entonces los pujos fueron mas sencillos, porque veia como se movia la cabeza hacia fuera y sabia que lo estaba haciendo bien. Pregunté si me iban a cortar, me dijeron que solo si era necesario, no lo hicieron. La matrona de mi izquierda dejó de hacerme aquella maniobra tan molesta para mi, habia otra a mi derecha que me animaba..entonces me sentí más fuerte y en otro pujo..salió la cabeza...impresionante...tengo esa imagen gravada en mi retina, me pareció una cabeza enorme, como había salido por ahi? Tenia carita de muñeco con los ojos cerrados e hinchados y la cara y el pelo impregnados en una sustancia blanca y gelatinosa, el vernix.

 Después de aquel shock, en unos instantes la matrona enfrente mia se levantó y me lo puso encima..mi hijo!! Le abracé, le besé, sonreí...el padre hacia fotos, tal y como le habia pedido, y se acercó a conocerlo. Me desgarre muy poco, me dieron 4 puntos, me pareció un parto muy bueno y rápido, la epidural se convirtió para mi en el mejor invento del mundo y me dejó en un estado de embriaguez absoluta.

 Mandaron a mi marido a la habitación y un celador vino a recogerme, era joven, y muy guapo, con el pelo algo largo, ondulado y rubio, en el pasillo, acostada con mi peque, por un momento me pareció estar en el paraiso. Mi hijo hacía un ruido como de quejido, y el celador me decia " uy a este niño le pasa algo, me lo voy a tener que llevar" sonreí porque pensaba que bromeaba, pero al llegar a planta una enfermera cogió a mi hijo y se lo llevó.

 En la habitación me encontré sola, la enfermera volvió para decirme que mi hijo estaba en la incubadora, que lo traería cuando hubiera entrado en calor, (estaba por debajo de 35 grados)..llamé a mi marido se habia ido a comprarle un body, ya que alli no daban nada, ni siquiera pañales!!..entonces, recostada en la cama, miré por la ventana, el mundo parecia el mismo, con sus prisas, con su humo, con sus ruidos, pero no, el mundo que conocí ya no existia, se abría un nuevo horizonte para mi, un mundo completamente nuevo, el de la maternidad.

miércoles, 13 de marzo de 2013

¡FELIZ CUMPLEAÑOS!


Como quien va con prisas a la oficina porque llega tarde, a las 8:08h de la mañana, hace hoy un año, llegaste tú, 17 días antes de lo esperado, y a cientos de km de casa.

Hoy cumples un año de vida, y yo un año de madre, con sus idas y venidas, con sus sonrisas y sus lágrimas, pero siempre teniéndote a ti, como faro y guía en este camino, en el que vamos de la mano.

Gracias, por aquel abrazo infinito, por este amor a primera vista, a última vista, a cualquier vista!

Hace un año cambié mi ombligo por el tuyo, y entendí para siempre el significado de aquella canción que decía:

"How wonderful life is now you are in the world"

¡FELICIDADES!
Y que cumplas muchos, y muchos y muchos más.

Que maravillosa es la vida, ahora que estas en el mundo!

lunes, 11 de marzo de 2013

He perdido los zapatos

Hace ya días que tuve una especie de sueño-visión. Fue algo raro, pero lo recuerdo muy bien.

Estaba escalando una montaña, había niebla, hacia frio, me encontraba ya a gran distancia del suelo, y portaba en mi espalda una mochila, recuerdo que pesaba.

En ella estaban mis sueños, mis ilusiones, mi hijo, mi familia, mis amigas, el trabajo, los sueños sin cumplir esperando alcanzar la cima, y sueños que había perdido, que cayeron al vacio, sin poder rescatarlos.

En tal situación miré hacia abajo, y no me sorprendió la alta altura en la que estaba, fue otra cosa la que me dejó extrañada: mis pies estaban descalzos. Morados y ensangrentados, me quedé perpleja contemplándolos, yo iba bien abrigada y sin embargo, mis pies estaban desnudos.

Me pareció raro. Toda mi familia se dedica a la venta de calzado, siempre he estado rodeada de pares y pares de zapatos, de todas la formas y colores, de piel, sintéticos, de cuña, tacón, planos, cerrados, despuntados, destalonados...

¿Qué significaba ese sueño?, ¿acaso intento enfrentarme a la vida sin una buena base para caminar?. ¿Por eso me duele tanto todo lo que me pasa? porque a cada paso que doy, ¿me voy clavando piedras y demás obstáculos?. Estoy rodeada de cientos de zapatos y ¿me enfrento a la adversidad completamente descalza? significa eso que no soy capaz de pedir ayuda, que lo llevo todo en silencio, y tengo a mis pies, los que me hacen seguir adelante, completamente martirizados?

No sé cuanto tiempo llevaba escalando esa montaña, ni si la había empezado bien calzada, y en algún momento del trayecto perdí los zapatos y cayeron al vacío, sea como sea, lo que sí sé, es que alcanzaré la cima, con la mochila cargada de sueños y proyectos, cueste lo que cueste, con zapatos o sin ellos.

viernes, 8 de marzo de 2013

Se acerca la fecha

No me lo puedo creer, no puede ser verdad, por más vueltas que le doy a mi cabeza, no consigo asimilar que en unos días mi pequeñajo vaya a cumplir un año.
Un año desde aquel primer abrazo, de aquel llanto, de aquel quejido intermitente, de aquel vuelco al corazón, de aquel primer día del resto de mi vida.
Ahora tengo la sensación de que se ha pasado muy rápido, que no he disfrutado lo suficiente de mi bebe, que con el trabajo me he perdido muchas cosas, que quizá no le haya hecho suficientes fotos, que...no sé, mil y una cosas pasan por mi cabeza en estos momentos.
Luego esta el cumpleaños..madre mía, siento que me queda grande..que preparo para merendar? A cuantas personas invito? A que jugarán los niños que vengan? Que pongo en la tarta??
Esta empezando a entrarme estres pre-cumpleaños..y eso que el protagonista aquí, mi hijo, no se va a enterar de nada.
Por otro lado tengo la sensación de que se hace grande, y se me escapa de las manos, crece a toda velocidad, y yo ya no soy imprescindible para él, lo que me otorga gran libertad, y a la vez me invade la melancolía que supone que deje de ser bebé y se convierta en niño.

lunes, 4 de marzo de 2013

Me sobra el corazón

 Hoy estoy sin saber yo no sé cómo,
hoy estoy para penas solamente,
hoy no tengo amistad,
hoy sólo tengo ansias
de arrancarme de cuajo el corazón
y ponerlo debajo de un zapato.


Este trozo del poema de Miguel Hernandez, "Me sobra el corazón", define perfectamente como me siento yo ahora. Estoy en el trabajo, y de repente, mis compañeras han empezado a hablar de que otro compañero va a ser padre, será su tercer hijo, y entonces, la que está embarazada ha empezado a hablar de su embarazo, de que esta muy sensible, que llora con facilidad, de lo ilusionada que esta...todo eso comentandomelo a mi!!..me ha parecido poco solidario, incluso un insulto..entiendo que este feliz, y yo lo estoy por ella, pero, por favor, un poco de humanidad..solo pido eso...solidaridad con mi pérdida.

Yo lucho cada dia por no llorar, cada dia por salir adelante, por no hechar la vista atrás y no ver negro el horizonte..pero ante estas situacíones, me sobra el corazón, como a Miguel Hernandez, lo colocaria debajo de mi zapato, para que nadie más pudiera pisarlo..solo yo.

Escribo estas lineas desde la oficina, intentando que no me duela tanto las palabras que tan alegremente sueltan los demás. Intentando arrancarme de cuajo el corazón, para que no me duela.


domingo, 3 de marzo de 2013

Lo que perdí al tenerte

No voy a negar que convertirme en madre haya sido la mejor experiencia que he tenido, que mi hijo sea lo más importante en mi vida, pero mentiría si dijera que no hay cosas que hecho de menos, que he perdido.

Lo que más hecho de menos es poder dormir cuatro, cinco, seis, siete u ocho horas de tirón, y es que aunque ha habido épocas en que parecía que todo mejoraba...al final no ha sido así. Mi hijo se despierta muchas veces durante la noche, el motivo: la teta. Se ha acostumbrado a dormir con la teta, y ahora no hay forma de quitársela. Duerme conmigo, y se coge, se suelta, se vuelve a coger se vuelve a soltar..y así hasta que el maldito despertador me hace saltar de la cama.

Poder tumbarme en el sofá y disfrutar de una película, o un café, o ver un rato la tele, lo que sea que no implique estar pendiente de los movimientos y travesuras que mi vástago ingenia a cada momento.

Salir a cenar o al cine, o ambas cosas a la vez, sin tener que estar llamando o preocupandome de que el peque esta bien, y poder regresar a las tantas.

Salir de casa sin potitos, pañales, toallitas, gorrito, cambiador, babero, biberón..etc etc

Ir de compras, sin empujar un cochecito, sin mirar el reloj cada 10 minutos, sin parar para cambiar pañales, o dar biberones o potitos, o cargar con el peque en brazos, y empujar el carro a la vez..y desear no haber ido de compras. Como hecho de menos comprar sin relojes ni horarios, y probarme y probarme, y recorrerme todas las tiendas durante todo el día...snif.

El tiempo que tenia para mi, para leer, para ducharme, peinarme, maquillarme, vestirme...Ese tiempo ahora lo dedico a mi hijo, de modo que el sale a la calle hecho un pincel, y yo parezco un esperpento, con una combinación nefasta de prendas o colores, o con manchas de biberón o potito en la ropa, sin haberme peinado o lavado la cara..y con esas malditas ojeras instaladas en mi cara.

Mi pelo. No es que tuviera una melena abundante y voluminosa, pero tenia un pelo más o menos normal, y regularmente repartido. Ahora no. La caída vertiginosa empezó al rededor de 5 meses después de dar a luz, y aunque he recuperado la mayoría, me noto "entradas" y "clareos" en algunas áreas de mi cabeza. Sé que mi pelo jamás volverá a ser el que era.

Mis tetas. Siempre me he sentido cómoda con esta parte de mi cuerpo, hubiera preferido tener algo menos en cuanto a volumen, pero la firmeza y forma eran perfectas. Y lo digo en pasado porque ahora, entre tomas observo como lo que ha quedado, y quedará cuando termine la lactancia, son dos colgajos vacíos, que apuntan al suelo. No me preocupa demasiado, puesto que sabia que este momento tenía que llegar.