lunes, 13 de marzo de 2017

Sonrisas y lágrimas

No sabía cómo titular esta entrada.

Enero vino con la promesa de un nuevo bebé en camino, un año después del último positivo.

El 10 de enero, día 9 post ovulación, no pude evitar llorar, test negativo y a mis espaldas 7 meses de búsqueda, que pesaban demasiado.

12 de enero, Sta Tatiana, ese era el nombre que quería ponerle si era niña, sería un magnífico día para celebrar un positivo. Empecé la mañana como siempre, test en mano y un vasito colmado de pipi concentrado. No se veía nada.

Me fui a la cocina a prepararme el café, nada. Mientras preparaba el desayuno, el test descansaba en la mesa, desafiante, a mi lado, no podía perderlo de vista, todos dormían, y yo no sabía si mirarlo o no mirarlo. Me acerqué al test, sin tocarlo. Uy, hay algo ahí? Es eso una sombra? Lo cogí, me lo acerqué hasta fijar la vista casi de una manera enfermiza, estaba soñando? Me había vuelto loca? Tantos meses de test negativos y mis ojos​ veían una sombra??

Se dibujó en mi cara una sonrisa. No estoy soñando, no estoy alucinando, x fin el ansiado positivo estaba ahí!!! 4 años después de haber abierto este blog, 7 meses de búsqueda y ahí estaba, como agua de mayo, como un remanso de paz para mi sufrido estado de ansiedad. Fui corriendo, casi saltando hasta mi cuarto. Desperté al padre de la criatura casi a golpetazos. Despierta!! Despierta!! Mira!!!! Que ves aquí????
-Parece que se ve algo.

No podía ser más feliz. Lo había logrado.
Ese día fui al trabajo casi volando, flotaba por la calle como loca en su mundo, un mundo de fantasía, de bebés, de hermanos jugando, de familia feliz.

Fui consciente de los riesgos que existían, pero, quien podía quitarme la sonrisa de la cara? Me negaba a ser negativa, x estadística está era la buena, esta era la mía. Floté durante días, durante semanas​, que día tan bonito, Sta Tatiana. Sería una premonición? Sería una niña? Una hermanita para mis hijos?.

La alegría duró hasta la primera ecografía, no sé ni cómo aguanté hasta las 7 semanas, 7+4 para ser exactos.

Nada más introducir el ecógrafo lo supe, no se veía embrión​. El gine buscaba y buscaba, se apreciaba un saco grande, pero vacío. No quería oírlo, pero tuve que tragarme sus palabras " el saco está vacío, y por las semanas que estás, y el tiempo que hace que el test te dio positivo, la cosa pinta muy mal".

Y ahí estaba yo, en la camilla, con todos mis sueños e ilusiones desparramados. Que feliz hubiera sido, que feliz!! Y sin embargo me sentí desgraciada y miserable. Todo había terminado. Una semana más de espera, x si acaso, y elegí directamente el legrado, el 14 de febrero, día de los enamorados, nos despedimos. 

Me faltabas tú, en esa ecografía, en ese saco, en mi vientre, en mi vida, faltabas tú. Y sentí que me faltaba el aire, que no podía vivir sin tí.

Pero aquí sigo, aquí vivo, los días han pasado, 27 para ser exactos. Hoy mi hijo cumple 5 años. Anoche hacía 5 años que me dieron los dolores de parto, y 5 años después empecé con los dolores de regla post legrado. Que caprichoso es el destino. Y a veces, que amargo.

Hoy he tenido revisión, y me han dado los resultados de anatomía patológica:
Feto femenino sin anomalías cromosómicas.

Si, eras una niña. Mi niña pequeña. Mi niña preciosa.
Hoy me siento con fuerzas para seguir luchando​. Supongo que estoy en esa fase de la montaña rusa en la que se ha convertido mi vida. Hoy me siento positiva. Mañana no lo sé.

El gine que suele ser muy frío y antipático, me ha tratado con dulzura. Por estadística me ha dicho que ya me toca un embarazo a término, que la " mala suerte" debería haber acabado. Puedo buscar en este mismo ciclo, me ha dado su aprobación, y me he sentido tremendamente en paz. Creo que sabía a la perfección lo que necesitaba escuchar.

Hoy echo de menos, como nunca, a esos bebés que se marcharon, lo sé, no se pudieron quedar, pero yo, los deseaba tanto! Hoy lloro de tristeza y tb sonrio al recordar aquel vuelo caprichoso de la cigüeña, el vuelo a Barcelona, que me convirtió en mamá.

Hoy agradezco más que nunca que mis hijos me eligieran, y que se pudieran quedar. Que haría yo sin ellos? Si no los tuviera? La respuesta es demasiado triste para poderla contestar.

Hoy sonrío y comienzo de nuevo la búsqueda, de nuevo las vitaminas, el ácido fólico, y un montón de cosas más. De momento mi corazón desea intentarlo de nuevo, desea seguir en el ruedo, aunque las heridas le hagan tambalear.

Hoy escribo para despedirme y para reiniciarme. Espero que esté sea mi punto de inflexión, y que ya sólo pueda contaros cosas bonitas.

Hoy me trago el dolor y las lágrimas, remiendo el corazón y me autoconvenzo de que no volverá a pasar. Me toca la " cara buena" de la moneda, se acabó el lado de la"soledad".