jueves, 13 de abril de 2017

Reseteando

Algo tiene Barcelona. Algo que hace que me olvide de casi todo.

Volver a pisar sus calles es cómo volver a los momentos más tiernos y felices de mi maternidad.

Y que mejor época, que semana santa, mis vacaciones preferidas, para visitar de nuevo esta ciudad.

Ahora, con la mente en otro sitio, sin problemas de trabajo ni de marido fuera, puedo respirar...Respirar y coger aire para recargar las pilas y volver a los carga. Al punto de partida, una vez más.

Barcelona me regaló el penúltimo positivo. Y aunque estoy sumergida en un ciclo raro, raro, con sangrado de por medio, pólipo y test de ovulación y embarazo negativos, la regla aún no ha llegado. Y mientras no hay regla, dicen, hay esperanza.

Descansar, desconectar, resetear, reiniciarme por completo, esa es mi meta ahora. Disfrutar de lo que sí tengo, de lo que más quiero en este mundo, y de lo que estoy más orgullosa. Esa soy yo, y al otro lado, a 500km de Barcelona, los problemas y miedos pueden esperar.

Felices vacaciones de semana santa!

domingo, 2 de abril de 2017

Vivir en el dia de la marmota

Estaba optimista, positiva, casi feliz. Para una recién legrada volver a la búsqueda es cómo volver a la vida. Y el gine me había dicho que sí, que ya podía.

Pero últimamente las alegrías me duran poco, y ésta alegría también se desvanecería.

El 13 de marzo, fecha de mi última entrada, y fecha del quinto cumpleaños de mi hijo, me vino la regla. Volvía a ser cíclica, volvia a ilusionarme, a soñar, volvía a la vida.

El miércoles pasado empecé a manchar, como era posible? Manchar a día 16 del ciclo? Aunque parezca raro no tenía la ovulación controlada, pero sabía que rondaba esa fecha...No le quise dar importancia.

Al día siguiente el manchado era sangrado. Pero que demonios? Sería por la ovulación?. Alarmada me fui a urgencias, me dijeron que el sangrado venía del cuello del útero, que lo tenía inflamado y con una úlcera. Una pomada y a casa. Respiré tranquila.

El viernes pasé el día como buenamente pude, me puse la pomada por la noche, y el sábado al despertar...Aquello ya no era manchar, era sangrar..Y de lo lindo.

No lo voy a negar, entré en pánico. Para empeorar el asunto estaba sola en casa con los niños, mi marido en Barcelona, mis padres se habían ido ese día a trabajar a otra ciudad. Llamé a mi suegra, pero había salido a comprar.

Por un momento me sentí perdida, descolocada. Como era posible que una herida en el cuello del útero sangrara como una regla? Que era lo que me pasaba?

Mi cabeza iba a mil, mis hijos corrían y jugaban x casa, empecé a tender la ropa rápidamente, mientras un llanto descontrolado se apoderaba de mi. Sería la perforación de útero que no tenían claro si había sucedido con el legrado? Me abracé a una sábana que había tendida en la galería, mientras me imaginaba que me extirpaban el útero por perforación. Maldita suerte la mía!

Mi suegra llamó y le conté x encima, me dijo que le dejara a los niños.
Sobre las 11:30 llegaba al hospital, mi cabeza no paraba de pensar pero estaba más tranquila. Unos 45 minutos después llegó mi turno.

La ginecóloga era una chica joven y agradable. Le conté mi historial de partos y abortos y el orden de cada, respondí a la típica pregunta de si eran todos del mismo hombre y pasé al ecógrafo.

Lo primero que me dijo, claramente, es que no provenía del cuello del útero. El sangrado era de dentro. Y empezó la eco. Aquel ecógrafo que tantas penas y alguna alegría me había dado. Tan conocido por mi! Tanto! Pero esta vez no había saco, ni bebé, ni embarazo. Era la primera vez que iba sin estar embarazada.

-Lo que tienes es un pólipo, de 11 mm.

No me supo decir si el sangrado era x el pólipo o la regla que se había adelantado (2 semanas). Me mandó unos anticonceptivos y me puso en lista de espera para quitármelo con una histeroscopia. Dos-tres meses aproximadamente tardaría.

Dos- tres meses?? Sin poder buscar??
Mi cara debió ser de risa, se quedaron atónitas la gine y las dos enfermeras que habían ( una de ellas la que asistió el parto de mi hija).

A la gine no le sentó bien aquella pregunta.

-A ver...lo de las pastillas es para que no sigas manchando, pero sino quieres no te las tomes.

Me dijo que el pólipo no impedía ni detenía los embarazos. Sin embargo, más tarde por internet leí lo contrario.

Salí de la consulta y rompí a llorar. No había consuelo para mi. Tres meses sin búsqueda?? En vez de estar contenta xq el útero estaba bien, xq habían dado con lo que tenía, que era algo que se podía solucionar...Me sentí tremendamente desgraciada por no poder continuar con la búsqueda.

Es entonces cuando me he dado cuenta, que así no puedo seguir. Mi felicidad depende de mear en un palito y tomarme la temperatura.

No, esto no puede seguir así. Tengo que cambiar el chip, este año y medio de búsqueda, con problemas, test negativos y dos legrados de por medio, me tienen saturada. No puedo vivir en esta montaña rusa.

Así que en esas estoy, deseando pasar página, pensar en otras cosas y no en lo mismo día tras día, volver a empezar, la búsqueda, el punto de partida, es como vivir en el día de la marmota todos los días.

Tengo que concienciarme, es difícil, lo sé, pero tengo que aceptar que no todo está en mi mano, que no todo se puede controlar, que a veces solo hay que ser paciente y saber esperar...Y mientras eso sucede, vivir el presente y disfrutar de todo lo que SI tengo, que es mucho.

Quizá en vez de tantas visitas al gine, deba empezar a visitar al psicólogo. O quizá simplemente necesite desconectar de verdad, pero... Cómo?