viernes, 27 de noviembre de 2015

Ansiedad

Ayer fue uno de esos días. De esos en que todo parece salir mal.

Sonó el despertador como cada mañana, a las 6:58h, el sonido de la alarma retumbó en mi cabeza, ¿ya era la hora de despertarse? No puede ser!! Después de dos noches con fiebre, Lia había pasado la noche algo mejor, pero su necesidad de teta cada dos por tres no había disminuido, lo que perpetuaba mi cansancio por falta de sueño.

Cuando estaba casi a punto de salir le sonó el móvil a mi marido, lo cogió desde la cama, la conversación parecía seria...esperé a ver que sucedía. No le habían autorizado el cambio de turno con otro compañero, por lo que debería estar en su puesto de trabajo...a más de 500km de casa!! ¿pero como no le habían avisado??

Su cara era un poema, y yo salí de allí pitando, mientras él empezaba una tanda de llamadas.

Casi cuando llego al pueblo donde trabajo me llama diciendo que el jefe le ha dicho, que si no se presenta le lleva  régimen disciplinario por "abandono del puesto de trabajo"..empiezo a descomponerme y mi cara se vuelve un libro entero de poemas...ahí empieza una ronda de búsqueda de billetes de tren, de avión, llamadas a mis padres, etc, etc

Mis padres saltan de la cama para ir a mi casa a quedarse con mis hijos, mi padre lleva a Sergio a la estación, coge el tren de las 11, no llega a poder cubrir el servicio. Toda la mañana tengo la sensación de que voy a vomitar en cualquier momento...a mitad mañana me llama mi marido, ha podido arreglar las cosas con el jefe, no habrá sanción, por un lado respiro, por otro me cago en la mala leche del jefe (que poca sensibilidad!! joder!!) la sensación de angustia no se me va.

Llego a casa de mis padres a comer, y voy a por el nene, lo subo al coche para recoger a Lia de la guardería, no dura ni 10 min, se duerme. Llevo a Lia al pediatra con Sergio en el carro dormido...por lo menos Lia esta bien, no tiene ningún virus extraño que le trastocaba la barriga...

Dejo al nene con mi madre, mientras voy al piso con mi hija. Todo se había quedado patas arriba, platos por fregar, ropa por el suelo, zapatos...recojo como puedo, friego y empiezo a cargar con ropa para los niños y para mi, para llevar a mi nuevo destino temporal: casa de mis padres.

Al llegar parezco una nómada total, aparco en la puerta, saco a la niña, dos bolsas gigantes, aparece mi hermano casi como un milagro, y me ayuda a subirlo todo a casa de mis padres. Se queda con Lia mientras bajo a recoger  a Sergio..se acaba de despertar! 2 horitas de siesta ná mas!! va a ser una noche prometedora y ya estoy que no me mantengo en pie..genial!! (modo irónico on)

Los baño, me ducho con ellos, les pongo el pijama, les doy la cena ante los lloros de "no quiero pescaditoooo", aprovecho para cenar con ellos, mientras me levanto al ritmo de "quiero agua" "quiero pan" "se me ha caído el agua" " una servilletaaa"...cuando termino de recoger la cena noto que los ojos se me cierran...en el salón, me acurruco en el sofá, los niños tienen ganas de fiesta, casi casi me encuentro con Morfeo cuando Sergio rompe a llorar...quiere estar con su papá...y se hace sus necesidades encima (estamos pasando una racha muy mala con eso, que me lleva desbordada).

Lo llevo al baño, lo limpio y cambio el pijama..intento llevarlos a la cama, imposible, tienen cuerda para rato. Aprovecho que mi hermano esta en casa para desplomarme en la cama..ahora sí, no puedo más, me duermo escuchando a mi madre llegar a casa, y decir algo de mis hijos. Pasado un rato entran a Lia conmigo...se duerme a mi lado..ya no escucho nada más...a las 4 de la mañana me despierto pensando..y Sergio? le habrán puesto el pañal? me levanto para comprobarlo..si!! menos mal!!

Vuelvo a la cama para descansar lo poco que me queda..y ahí esta la alarma del móvil de nuevo, a las 6:58h de la mañana.


El día anterior, 25/11/15, había tenido el reconocimiento médico del trabajo. Le comenté que por las mañanas tengo mareos y sensación de angustia..que hasta las 11 o más no se me pasa. Me dijo que si la analítica salía bien, podría ser un cuadro de ansiedad. No digo más.

El estar mi marido en Barcelona me está sobrepasando, ha hecho mella en mi salud, en mi estado de ánimo. Los años van pesando a mis espaldas, los días de soledad, de falta de ayuda, de comprensión, la sensación de impotencia y de frustración es ya insostenible. Hemos marcado una fecha, si el año que viene no viene para aquí, van a haber cambios, vamos a decidir como lo hacemos, pero ya no podemos vivir así. Me niego.

Ante esta situación os preguntareis como es que me planteo ir a por otro bebé. Creo que no tengo respuestas para esa pregunta. Sinceramente, después de días como el de ayer, no lo sé.



4 comentarios:

  1. Hola Lia,
    Gracias por pasar por mi blog. He leído tu último post... Ojalá se tuvieran más en cuenta las necesidades de las familias con hijos pequeños. Todavía queda mucho camino por recorrer en este país.
    ¡Ánimo! Un saludo

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  2. Gracias Mayca, la conciliación es una mentira, y si le añades la distancia en el trabajo, es horroroso...espero que vengan pronto tiempos mejores. Intento pasarme siempre que puedo x tu blog, me encanta como escribes!

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  3. Yo si que he estado desaparecida jejeje... Pues si tu has tenido ese día ansiedad, yo tengo casi que todo el 2015... ya quiero que se vaya este año... si algo bueno me ha enseñado es que uno solito se lía muchas veces, la cabeza se llena de crisis y a veces no miramos las soluciones...Paciencia, respira y que buena noticia que ha pesar de todo quieran un tercer nene...

    Abrazos

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    1. Gracias Patricia, ese dia fue uno de tantos, pero un ejemplo de como nos salen las cosas muchas veces, al reves. Espero que lo tuyo no sea nada, y te vayas encontrando mejor, con menos estres.
      Como tú dices, todo esta en la mente...a veces nosotras mismas nos complicamos y nos ahogamos en vasos de agua..mucho ánimo!!
      Un besazo

      Si pienso mucho lo del tercero...me hago para atrás :(

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